domingo, 11 de diciembre de 2011

Misterioso Bafomet -2-


El esoterismo de los tem­plarios sigue siendo un enigma. Es conocida la historia de esa famosa Orden, fundada en 1117 para la protección de los peregrinos en Tierra Santa, cuya regla había sido establecida por San Bernardo: después de combatir mucho tiempo a los sarracenos, los templarios debieron por último retirarse de Siria luego de la reconquista del país por los musulmanes, pero habían adquirido gran poderío y riquezas en la cristiandad, y poseían encomiendas en todos los reinos de Europa. El proceso intentado por el envidioso Felipe el Hermoso a esos hombres demasiado influyentes ha sido referido a me­nudo: todos sabemos de qué manera el sobera­no acabó por arrancar al papa Clemente V la condena de los templarios con la acusación  de  "renegar de Cristo, apostatar, entregarse a actos de idolatría y a horribles libertinajes en el curso de ceremonias secretas". Después de un largo proceso y la disolución de la Orden pronunciada por la Bula papal de 1312, el Gran Maestro Jacques de Molay y gran número de templarios fueron quemados vivos en París, en 1314.

¿Tenían los templarios una doctrina secreta y ritos de iniciación? El problema ha suscitado gran número de interpretaciones; ciertos historiadores niegan categóricamente la existencia de un esoterismo templario, y otros, al contrario, no vacilan en hacer derivar la francmasonería de la Orden mártir. En realidad, bien parece que los templarios tuvieron unculto secreto y doctrinas reservadas a los ini­ciados, y que esas doctrinas heterodoxas les fueron trasmitidas por heréticos musulmanes —quizá los asesinos, con quienes tuvieron relaciones—, herederos de especulaciones gnósticas.

Pero conocemos muy mal dicho esoterismo, tanto más cuanto que los documentos seguros faltan casi totalmente. El historiador  se ve reducido a conjeturas, con respecto a las figuras bafométicas (de bafometo="inspiración del Espíritu"), especie de ídolos andróginos, que representan la unión de los principios masculinos y femeninos, cuyo papel en los rituales secretos no ha podido ser precisado; con suficiente certeza. Aroux, citando a von Hammer, alude a "símbolos gnósticos impresos en un talismán hallado, en el siglo XVII, en la tumba de un templario, muerto antes de la destrucción de la Orden", y asimismo a "dos cofrecillos descubiertos, uno en Borgoña, el otro en Toscana, sobre los cuales se reconocen esos mismos símbolos, principalmente la cadena de Eones, representada por la houppe las pruebas del fuego y del agua, el falo, el cteis, el toro de Mitra y la cruz ansada de los egipcios", y también a "esos emblemas extraños esculpidos en la puerta de algunas iglesias, donde parecen querer mostrarse y ocultarse, a un mismo tiempo, las doctrinas interiores del templo" (por ejemplo, en lo alto de la puerta principal de la iglesia Saint-Merri se halla un Bafometo, entre dos ángeles que le echan incienso)... Pero ignoramos casi todo del esoterismo templario, y el historiador debe des­confiar de las descripciones demasiado preci­sas que dan ciertos ocultistas de los misterios practicados por los Caballeros.


Nota: Texto del libro de Serge Hutin Las sociedades secretas, del capítulo III .  OJO: En el próximo artículo que vamos a incorporar en est blog, René Guénon quita credibilidad a Aroux-Von Hammer en estas "derivaciones bafométicas"

 Artículos relacionados:

Misterioso Bafomet -1-

Los templarios en Eliphas Levi (2).-Bafomet

Los templarios en Eliphas Levi (3).-Bafomet de Nuisement

No hay comentarios:

Publicar un comentario